Una mujer de 42 años fue rescatada en condiciones inhumanas en General Güemes, provincia de Salta. La víctima, que tiene síndrome de Down y discapacidad mental moderada, estaba encadenada a una cucha de perro en el fondo de una casa precaria.

El rescate fue posible gracias a un vecino que, cansado de presenciar el sufrimiento de la víctima, tomó fotografías de su encierro y las llevó a la Comisaría Primera de General Güemes. Las imágenes, que muestran a la mujer rodeada de inmundicia, maleza y animales, impulsaron a las autoridades a actuar de inmediato.

La policía acudió rápidamente al lugar. Inicialmente, la mujer que atendió a los agentes intentó negar los hechos y retrasar el ingreso, pero finalmente permitió que revisaran la propiedad. En el interior, los oficiales encontraron rastros que confirmaban las denuncias: marcas en el suelo, cadenas y una argolla en la cucha del perro.

Tras un diálogo con los agentes, la víctima apareció cubierta de tierra y con lesiones visibles en los tobillos, producto de las cadenas que la inmovilizaban. La víctima señaló a un tal Pablo E. como el responsable de su sometimiento.

La justicia dispuso el traslado inmediato de la mujer para su atención sanitaria. Mientras tanto, se secuestraron las cadenas, un candado y otros elementos que serán sometidos a pericias.

Vecinos del barrio expresaron su indignación y solidaridad con la víctima. “Es un nivel de crueldad que nunca imaginamos en nuestra comunidad”, comentó una vecina conmovida.

Una vida marcada por el abandono

Según publicó el diario local El Tribuno, la mujer vivía sola en un gallinero, compartiendo espacio con gallinas y perros, sin acceso a condiciones básicas de dignidad. Según testimonios, realizaba sus necesidades en el mismo lugar donde estaba encadenada, mientras sus agresores negaban incluso su existencia.