Por otro lado, mientras transitaba su carrera detrás de la redonda, tuvo el privilegio de alzarse con diversos títulos. Pero los gritos de gloria más recordado por el exdefensor fue la Copa América con Uruguay y la Libertadores con Peñarol.

Alfonso Domínguez y su paso por el fútbol

Domínguez, conocido como «La Guacha«, comenzó su carrera en 1985 con Peñarol de Montevideo, donde tuvo un exitoso período de siete años. Durante su tiempo en el club, ganó dos campeonatos uruguayos (1985 y 1986) y la Copa Libertadores en 1987. Su destacada actuación en Peñarol le permitió llamar la atención de la Selección uruguaya.

Con la selección, Domínguez participó en la Copa América de 1987, donde Uruguay se coronó campeón, y en la Copa América de 1989 en Brasil. También formó parte de las Eliminatorias para el Mundial de Italia 1990 y del torneo en Europa. En la Copa América de 1987, enfrentó a Diego Maradona, quien elogió su marca sin faltas, lo que ayudó a Domínguez en su carrera futura.

En la temporada 1992/93, Domínguez se unió a River Plate, aunque su paso fue breve debido a los pocos minutos que le concedió Daniel Passarella. A pesar de ello, ganó el Torneo Apertura 1992. Durante su estancia en River, compartió equipo con figuras como Ángel Comizzo, Jorge Higuaín y Ariel Ortega. También presenció el inicio de Marcelo Gallardo.

Después de su tiempo en River, el exdefensor regresó a Uruguay para jugar en Nacional entre 1994 y 1996. En 1997, se unió a Huracán Buceo, donde se retiró del fútbol a los 35 años tras tres temporadas en el club.

Su vida después del retiro

Después de retirarse del fútbol, el exjugador de Peñarol enfrentó desafíos económicos muy complejos, motivo por el cual se dedicó a trabajar en su pueblo natal, Durazno. A sus 58 años, ocupa un puesto en la Municipalidad en el área de deportes y también dirige un club de barrio.